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Colima, México, Avanzada (02/07/2020).- Desde el 2016 y hasta el 2018, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró que en ese periodo, el Gobierno del Estado de Colima utilizó de forma indebida 5 mil millones de pesos.
Los señalamientos más graves ocurrieron en la cuenta del 2018, cuando la ASF le observó a la administración estatal 4 mil 500 millones de pesos provenientes de recursos federales.
En la última entrega de fiscalización correspondiente al 2018, la ASF observó la forma en la que la entidad gastó los recursos enviados por el gobierno federal y determinó un posible daño a la hacienda pública federal por 4 mil 500 millones de pesos.
Dos años antes, en el 2016, la ASF determinó que la entidad tenía observaciones por 600 millones de pesos, lo que ocasionó que a propuesta de la entonces diputada, Martha Sosa Govea, la contralora estatal, Agueda Catalina Solano Pérez compareciera en el Poder Legislativo, sin embargo, el encuentro fue a puerta cerrada a petición de la funcionaria estatal
La ASF que entre el 2016 y 2017 (corresponden a los dos primeros años de gobierno de Ignacio Peralta Sánchez) se le solicitó al gobierno estatal que regrese a la Federación 626 millones 110 mil pesos que fueron enviados y utilizados de forma irregular.
El Órgano Fiscalizador establece que el monto probable por recuperar en el 2016, es de 369 millones 734 mil pesos, mientras que en el 2017, la cantidad asciende a 256 millones 376 mil pesos.
De acuerdo al proceso de fiscalización de la ASF, a partir de que la Auditoría notifica a la entidad sobre las observaciones, el estado tiene cerca de 7 meses para tratar de comprobar que ejerció de forma adecuada los recursos observados.
En caso de que no logre la solventación, la ASF podrá promover recursos ante el SAT, o de carácter penal en contra de los gobiernos o funcionarios involucrados en el uso irregular de los recursos.
